Para la preparación de una receta es primordial tener en cuenta los detalles y poder lograr un suculento plato. Sin embargo, con el paso del tiempo dicha receta puede tener pequeñas modificaciones para adaptarse a sus consumidores. Y esto es algo que ocurre con el diseño: no basta con una guía estática, ya que dependiendo de los contextos (social, industrial, etc) en los que se desarrolla un diseño debemos combinar componentes reutilizables.
Para esto podemos contar con una herramienta dinámica llamada sistema de diseño. Con esta herramienta buscamos entregar a los usuarios ese «plato suculento» en experiencias digitales memorables.
El sistema de diseño es un proceso sistemático desde la planeación, en el que se estandariza el diálogo entre las áreas partícipes del proceso del diseño y la programación, permitiendo una comunicación más fluida, además, saber cómo se utilizan e implementan los elementos particulares y generales involucrados en el proceso.
contienen información de cómo deben ser hechas las características de un producto y/o servicio, por ejemplo:
Pantallas (layout, colores, íconos)
Journeys de usuario (tipo de investigación en los touchpoint)
Imagen corporativa (tipografía, colores, figuras geométricas)
De esta manera dichas pautas enmarcan: composición, diseño y la apariencia general de la marca en una organización.
elementos de interfaz de usuario. La interfaz es la zona de comunicación entre el sistema y el usuario, y para que se dé esta comunicación se agregan los elementos necesarios para que el usuario pueda transmitir su necesidad. A dichos elementos se le agregan componentes (botones, cuadros de diálogo, menú desplegables, imágenes, etc) que permiten procesar los requerimientos del usuario.