¿Qué es la investigación etnográfica digital?
La etnografía digital, también conocida como netnografía, es un rumbo que tomó la etnografía en el plano digital. La etnografía, una rama de la antropología que se utiliza para aprender y estudiar comunidades de las que se sabe muy poco, implica una inmersión de campo prolongada que ayude a sacar descripciones densas y detalladas de su cultura. Hay que aprender a vivir en ella, con su idioma, sus costumbres; limitarse, en lo posible, a la mera observación de sus hábitos, maneras y formas.
Usos de la etnografía digital
La etnografía digital, por su parte, se dedica al estudio detallado de las relaciones sociales que se dan en la red, extrapolando las técnicas tradicionales de investigación etnográfica personal al estudio de las culturas y comunidades digitales formadas en la web, por medio de apps, foros, plataformas, etc. Parafraseando lo que dijimos en un white paper de etnogragía (que te recomendamos descargar para que sepas cómo hacer una entrevista etnográfica), la etnografía ofrece la gran ventaja de construir un conocimiento profundo de los hábitos, deseos y necesidades de las personas. Para los negocios, esta puede ser la base de productos y servicios mejor adoptados, pensados con precisión para sus clientes y usuarios finales.
El problema de hacerla desde la antropología es que demanda demasiado tiempo y esto, en el ámbito empresarial, se traduce en poca concreción, así que la investigación para el diseño toma algunas cosas de ella, como la entrevista y la compilación de datos, y las convierte en insumos para orientar e inspirar acciones de negocios.
¿Para qué sirve la etnografía?
Una entrevista etnográfica, con preguntas no directivas, nos permite comprender al usuario. En general, es una herramienta de inmersión que facilita observarlo, si se quiere, de manera más objetiva.
Al introducirse en su ecosistema, casi infiltrándose en él y sin predisponerlo, podemos observar patrones de comportamiento, conductas y deseos que en una entrevista convencional no respondería con la honestidad que se necesita para un estudio de consumo.
Antecedentes de la etnografía
Se le llama etnografía porque en principio era para estudiar etnias apartadas y de las que poco se sabía.
Sin embargo, aunque se le atribuye a la antropología su uso, aplicación y descubrimiento, ya en la literatura, la filosofía, biología, historia y sociología del siglo XIX pueden encontrarse descripciones detalladísimas, densas y profundas.
En las novelas de Tolstoi, por ejemplo, y en toda la obra de Hegel, hay tal nivel de detalle e información que bien podríamos decir que cimentaron a esa ciencia que apenas empezaba a surgir.
En el campo de las ciencias exactas, Humboldt y Darwin también iban a aportar bases, pues la pormenorización y la minucia que se aprecia en sus tratados no son muy diferentes a la que se ve en los trabajos de Malinowski, Basso o Stuesse. Podemos decir, entonces, que la etnografía toma un rumbo para la antropología, incluso un nombre, pues aparece en una época que requería de un método de condensación impresionante, dada la vertiginosidad de los acontecimientos, figuras y movimientos que hubo en ese solo siglo.
